Sebasg1973
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Es obvio que esta noticia hoy pasa por alto pero me parecio interesante compartila
En el Bulldog Coffee Shop de Oakland, a 40 minutos de San Francisco, reina un gran optimismo. Todos piensan que el 2 de noviembre, el día de las elecciones, California se transformará en el primer estado de Estados Unidos en legalizar la marihuana. “La Proposición XIX va a ser aprobada. A partir del 3 de noviembre vamos a poder cultivar, vender, poseer y fumar marihuana legalmente” dice a Clarín , Judy Qua.
A primera vista, el Bulldog es un café como cualquier otro. Venden expresos, cortados, cheesecakes y muffins. En la parte de atrás del café hay, sin embargo, un dispensario donde venden y fuman marihuana.
“La llamamos ‘medical marihuana’ porque actualmente para poder comprar ‘un joint’ (un porro) necesitás una receta de un médico. Desde que, en 1996, fue aprobada la Proposición 215 la venta de marihuana destinada a calmar los dolores de un paciente es legal. Con la Proposición XIX queremos ir más allá, que todo el mundo pueda comprar legalmente marihuana,” explica Judy.
Inicialmente, la mayoría de los californianos estaban de acuerdo con esta proposición. Pero la oposición ha sido eficiente y la última encuesta indica que hay un 51% en contra y sólo un 40% a favor. Mucho dependerá, entonces, de si los jóvenes salen a votar o no.
Aunque la Proposición XIX todavía no ha sido aprobada, el cultivo de marihuana ya es un negocio anual de 35.800 millones de dólares a nivel nacional y de 14.000 millones de dólares en el Estado de California . Esto significa que la marihuana reditúa en Estados Unidos más que el cultivo del trigo y del maíz combinados.
Richard Lee, el dueño de Bulldog Coffee Shop y mentor de la Proposición XIX fue uno de los primeros en comprender la dimensión de este negocio. “En un estado donde tenemos un déficit de 20.000 millones dólares, la legalización de la marihuana permitirá gravarla. De este modo, la recaudación impositiva aumentará y el déficit disminuirá y, al mismo tiempo, se reducirá el crimen,” explica a Clarín en su tienda.
En Oakland durante el 2007 se aprobó una iniciativa que prohíbe la persecución por tenencia y consumo de marihuana sea una de las prioridades de la policía local. Desde entonces esta ciudad es la meca del “green rush” o “marihuana”, un movimiento parecido al “gold rush” que trajo a California a miles de buscadores de oro a principio del siglo XIX .
Lee ya tiene dos cafés/dispensarios y teniendo en cuenta lo que “se viene” en 2007 fundó la universidad “Oaksterdam” (una combinación de Oakland y Amsterdam) donde los profesores enseñan desde cómo hacer para que una planta de marihuana crezca más rápido hasta los aspectos legales de su distribución y comercialización. También dan materias para explicar cómo es el impacto físico de su consumo.
Esta corresponsal asistió a una clase sobre los diferentes métodos de ingestión, inhalación y vaporización. Mientras que en el laboratorio de la universidad vio cómo dos horticultores experimentaban con distintos métodos para cultivar marihuana en el interior de una casa.
A pocos metros de la universidad se encuentra I Grow, la primera megatienda de Estados Unidos que vende todo lo necesario para poder cultivar marihuana: sistemas de riego, lámparas especiales, ventiladores, fertilizantes. “Tenemos previsto abrir 75 tiendas como esta en todo el país”, dijo a Clarín Indigo Moonstar.
“Un estudio realizado por la Rand Corporation indica que sólo el 2% de los que consumen marihuana médica están enfermos. El 92% restante lo hacen por placer”, dijo a Clarín el vicepresidente de la Asociación de Policías, el agente Kim Randy.
“Estamos en contra de la proposición porque no disminuirá el crimen, no aportará beneficio económico. Además, el gobierno de Obama ya dijo que la marihuana seguirá siendo ilegal a nivel federal.” Según Randy, con la legalización el precio de la marihuana caerá. La recaudación de impuestos no aumentará, como sostienen los defensores de la legalización. La Proposición XIX tampoco preveé como hacer para detectar si alguien está manejando o trabajando bajo la influencia de la marihuana.
Sin embargo, para Kyle Kazan, un policía retirado que está militando a favor de la Proposición XIX “con la marihuana va a pasar como con el alcohol. Una vez que se levantó la prohibición disminuyó el crimen y cada Estado impuso regulaciones estrictas para su consumo que todavía hoy están vigentes.”
En el Bulldog Coffee Shop de Oakland, a 40 minutos de San Francisco, reina un gran optimismo. Todos piensan que el 2 de noviembre, el día de las elecciones, California se transformará en el primer estado de Estados Unidos en legalizar la marihuana. “La Proposición XIX va a ser aprobada. A partir del 3 de noviembre vamos a poder cultivar, vender, poseer y fumar marihuana legalmente” dice a Clarín , Judy Qua.
A primera vista, el Bulldog es un café como cualquier otro. Venden expresos, cortados, cheesecakes y muffins. En la parte de atrás del café hay, sin embargo, un dispensario donde venden y fuman marihuana.
“La llamamos ‘medical marihuana’ porque actualmente para poder comprar ‘un joint’ (un porro) necesitás una receta de un médico. Desde que, en 1996, fue aprobada la Proposición 215 la venta de marihuana destinada a calmar los dolores de un paciente es legal. Con la Proposición XIX queremos ir más allá, que todo el mundo pueda comprar legalmente marihuana,” explica Judy.
Inicialmente, la mayoría de los californianos estaban de acuerdo con esta proposición. Pero la oposición ha sido eficiente y la última encuesta indica que hay un 51% en contra y sólo un 40% a favor. Mucho dependerá, entonces, de si los jóvenes salen a votar o no.
Aunque la Proposición XIX todavía no ha sido aprobada, el cultivo de marihuana ya es un negocio anual de 35.800 millones de dólares a nivel nacional y de 14.000 millones de dólares en el Estado de California . Esto significa que la marihuana reditúa en Estados Unidos más que el cultivo del trigo y del maíz combinados.
Richard Lee, el dueño de Bulldog Coffee Shop y mentor de la Proposición XIX fue uno de los primeros en comprender la dimensión de este negocio. “En un estado donde tenemos un déficit de 20.000 millones dólares, la legalización de la marihuana permitirá gravarla. De este modo, la recaudación impositiva aumentará y el déficit disminuirá y, al mismo tiempo, se reducirá el crimen,” explica a Clarín en su tienda.
En Oakland durante el 2007 se aprobó una iniciativa que prohíbe la persecución por tenencia y consumo de marihuana sea una de las prioridades de la policía local. Desde entonces esta ciudad es la meca del “green rush” o “marihuana”, un movimiento parecido al “gold rush” que trajo a California a miles de buscadores de oro a principio del siglo XIX .
Lee ya tiene dos cafés/dispensarios y teniendo en cuenta lo que “se viene” en 2007 fundó la universidad “Oaksterdam” (una combinación de Oakland y Amsterdam) donde los profesores enseñan desde cómo hacer para que una planta de marihuana crezca más rápido hasta los aspectos legales de su distribución y comercialización. También dan materias para explicar cómo es el impacto físico de su consumo.
Esta corresponsal asistió a una clase sobre los diferentes métodos de ingestión, inhalación y vaporización. Mientras que en el laboratorio de la universidad vio cómo dos horticultores experimentaban con distintos métodos para cultivar marihuana en el interior de una casa.
A pocos metros de la universidad se encuentra I Grow, la primera megatienda de Estados Unidos que vende todo lo necesario para poder cultivar marihuana: sistemas de riego, lámparas especiales, ventiladores, fertilizantes. “Tenemos previsto abrir 75 tiendas como esta en todo el país”, dijo a Clarín Indigo Moonstar.
“Un estudio realizado por la Rand Corporation indica que sólo el 2% de los que consumen marihuana médica están enfermos. El 92% restante lo hacen por placer”, dijo a Clarín el vicepresidente de la Asociación de Policías, el agente Kim Randy.
“Estamos en contra de la proposición porque no disminuirá el crimen, no aportará beneficio económico. Además, el gobierno de Obama ya dijo que la marihuana seguirá siendo ilegal a nivel federal.” Según Randy, con la legalización el precio de la marihuana caerá. La recaudación de impuestos no aumentará, como sostienen los defensores de la legalización. La Proposición XIX tampoco preveé como hacer para detectar si alguien está manejando o trabajando bajo la influencia de la marihuana.
Sin embargo, para Kyle Kazan, un policía retirado que está militando a favor de la Proposición XIX “con la marihuana va a pasar como con el alcohol. Una vez que se levantó la prohibición disminuyó el crimen y cada Estado impuso regulaciones estrictas para su consumo que todavía hoy están vigentes.”