Orignalmente sólo se conseguía en Europa, pero ahora llega a los Estados Unidos. Lula 3D es un videojuego erótico que hace furor en el Viejo Continente y estará en marzo para los norteamericanos. Contiene imágenes de sexo explícito... e implícito.
El anuncio vale la pena, porque los fanáticos son miles. Tiene un contenido explícitamente adulto y sólo se podrá conseguir por distribución digital.
Se trata de las aventuras de la inteligentísima y sexy Lula, una productora de cine erótico, que busca salvar a sus actores preferidos de las garras de demoniacos secuestradores.
La colección de vestuario de Lula va a tono con un cuerpo voluptuoso y perfecto como sólo lo permite el mundo digital. La acompañan personajes de lo más divertidos y diálogos picantes por debajo de la trama misteriosa.
Lula no tiene tapujos en la pantalla: aparece con estrechísimos conjuntos de ropa interior, con contraluces en su departamento o en alguna oficina, o bien absolutamente despojada del corpiño o de la tanga.
En las poses tampoco parece tímida. Lo más que se viste la niña es con vestidos como de Marilyn Monroe o con trajes de épocas medievales y fantásticas.
Para los amantes del arte digital tampoco será una ardua tarea, por los colores, el realismo y la belleza de las escenas.
Mientras los fanáticos esperan que por el altísimo tono sexual los distribuidores no limiten demasiado el acceso, el famoso CDV Software Entertainment sabe que con Lula 3D llegará a esta parte del planeta una explosiva polémica dentro y fuera de las computadoras.
El anuncio vale la pena, porque los fanáticos son miles. Tiene un contenido explícitamente adulto y sólo se podrá conseguir por distribución digital.
Se trata de las aventuras de la inteligentísima y sexy Lula, una productora de cine erótico, que busca salvar a sus actores preferidos de las garras de demoniacos secuestradores.
La colección de vestuario de Lula va a tono con un cuerpo voluptuoso y perfecto como sólo lo permite el mundo digital. La acompañan personajes de lo más divertidos y diálogos picantes por debajo de la trama misteriosa.
Lula no tiene tapujos en la pantalla: aparece con estrechísimos conjuntos de ropa interior, con contraluces en su departamento o en alguna oficina, o bien absolutamente despojada del corpiño o de la tanga.
En las poses tampoco parece tímida. Lo más que se viste la niña es con vestidos como de Marilyn Monroe o con trajes de épocas medievales y fantásticas.
Para los amantes del arte digital tampoco será una ardua tarea, por los colores, el realismo y la belleza de las escenas.
Mientras los fanáticos esperan que por el altísimo tono sexual los distribuidores no limiten demasiado el acceso, el famoso CDV Software Entertainment sabe que con Lula 3D llegará a esta parte del planeta una explosiva polémica dentro y fuera de las computadoras.